Visitar una bodega puede ser una experiencia inolvidable, y que los visitantes se lleven un obsequio puede ser una buena forma de agradecerles la visita y asegurarte de que recordarán tu bodega una vez vuelvan a su casa.

Aquí tienes 10 ideas de obsequios baratos para dar tras la visita a una bodega:

1. Mini botella de un vino diferente: Algún vino diferente, hecho en pequeña producción. No tiene por qué ser caro ni el mejor vino del la bodega.
2. Tarrito de mermelada de la zona: Un pequeño frasco de mermelada puede ser un delicioso regalo.
3. Queso artesanal: Como regalo, si compran mucho vino tras la visita podrías ofrecer una cuña de queso de una quesería local.
4. Aceite de oliva local: Si en tu región se produce aceite de oliva, una botella pequeña de aceite de alta calidad es un buen obsequio.
5. Galletas artesanales: Un paquete de galletas o dulces artesanales de la zona.
6. Sacacorchos o quita cápsulas: Con el nombre de la bodega.
7. Plantas o flores locales: Una pequeña planta en maceta o un ramo de flores locales puede ser un toque especial.
8. Set de especias o hierbas: Un conjunto de especias o hierbas secas de la región puede ser un obsequio práctico y único.
9. Velas aromáticas: Una vela con un aroma inspirado en la región puede ser un regalo reconfortante.
10. Llavero o imán: Un llavero o imán con motivos locales es un detalle económico y sencillo.

Estos obsequios pueden ser una forma de complementar la experiencia de la visita a la bodega y asegurarte de que una vez en casa, el cliente siga recordando el buen momento que pasó en tu visita a bodega.

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